En esta crisis, lo peor está por llegar. Después de navidad (ya sabéis sandejemos la fiestas en paz, sanconsumo no se toca), bien seguro que encontraremos un proceso continuo (y no como un leve goteo) de despidos. Y entonces vendrá la histeria colectiva. Lo que ahora se siente como una niebla tenue, será palpable. Los signos están por doquier: los becarios pasan de toda la jornada a media jornada, los servicios contratados se reducen en un 50%, dónde vendías 20 vendes 1, las ventas se alargan (ad eternum que dirían algunos), las rebajas se anticipan,…
Que no cunda el pánico dicen… bueno o sí, a ver quién realiza una correcta gestión del despido, de forma trasparente para tranquilizar a la plantilla,… a ver quién es el listo.
Quién lo vea como una época de oportunidades tendrá un camino de salida. De todo se aprende.
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